Tres científicos han propuesto una nueva explicación para las múltiples figuras paleolíticas que representan a mujeres obesas o embarazadas. Las imágenes, talladas hace 38.000-14.000 años antes de la era común y apodadas habitualmente ‘Venus’, no tendrían nada que ver con deidades, sino que serían un patrón de adaptación humana al cambio climático de la época. El evento climático fundamental y duradero del Paleolítico superior fue la última glaciación y el equipo de investifadores estableció una relación entre el avance glaciar y las proporciones de las esculturas.
Según sus cálculos, las figuras femeninas eran normalmente más obesas durante el apogeo de la Edad de Hielo y más cerca del frente del glaciar. Por otra parte, eran menos obesas a medida que aumentaba la distancia al glaciar.
De esta manera, en las condiciones dadas de cada región la obesidad se convertía en una condición deseable, estima este grupo de antropólogos y médicos en un artículo publicado el 1 de diciembre. Las mujeres con sobrepeso pasaban mejor los meses de gestación en medio de la escasez de alimentos y ambiente austero.
“Algunas de las obras de arte más antiguas del mundo son estas misteriosas figuras de mujeres con sobrepeso de la época de los cazadores recolectores en la Europa de la Edad de Hielo, donde no se esperaría ver obesidad en absoluto“, dijo Richard Johnson, el autor principal del estudio, y profesor de la Escuela de Medicina en la Universidad de Colorado (EE.UU.). “Demostramos que estas figuras se correlacionan con momentos de estrés nutricional extremo“.
Decenas de estas estatuillas habían sido desenterradas en distintos años en Rusia, Alemania, Francia, Italia, Eslovaquia y la República Checa. El equipo no descarta que estos hallazgos pudieran tener un significado espiritual, ser una especie de fetiche o amuleto, pero la idea era proteger a la mujer durante el embarazo, el parto y la lactancia e incluso promover la obesidad entre las jóvenes.
Johnson y sus coautores, el profesor (retirado) de antropología John Fox, de la American University of Sharjah en los Emiratos Árabes Unidos, y el profesor asociado de medicina Miguel Lanaspa-Garcia,de la Facultad de Medicina de la Universidad de Colorado, midieron la relación cintura-cadera y cintura-hombro de las estatuíllas. Descubrieron que las figuras que se encontraban más cerca de los glaciares eran las más obesas en comparación con las que estaban más lejos.
“Proponemos que transmitían ideales de tamaño corporal para mujeres jóvenes, y especialmente para aquellas que vivían cerca de los glaciares“, dijo Johnson. “Descubrimos que las proporciones de tamaño corporal eran más altas cuando los glaciares avanzaban, mientras que la obesidad disminuía cuando el clima se calentaba y los glaciares retrocedían“.
El estado de desgaste característico de muchas de estas figuras invita a pensar que eran reliquias heredadas de madre a hija, de generación en generación. Las adolescentes o las mujeres embarazadas podían recibirlas con la esperanza de acumular la masa corporal deseada.
“Las figuras surgieron como una herramienta ideológica para ayudar a mejorar la fertilidad y supervivencia materna y neonatal“, explicó Johnson. Habló también de una “estética del arte” que “enfatizó la salud y la supervivencia” y no el carácter sexual, como se solía pensar.
Así, las ‘Venus’ serían una respuesta artística al avance de los glaciares y la caída de las temperaturas que provocaron un estrés nutricional, extinciones regionales y una reducción de la población en general.
https://www.sciencedaily.com/releases/2020/12/201201084750.htm