Valiéndose de la tecnología y la inteligencia artificial, las imágenes originales fueron coloreadas y la velocidad de los fotogramas aumentada. Del mismo modo, la resolución fue mejorada, brindando una nueva perspectiva de ese hecho histórico.
Los ‘clips’ restaurados corresponden a las imágenes obtenidas durante la Operación Crossroads, realizada en 1946, en la que fueron detonadas en el atolón Bikini, ubicado en el océano Pacífico, dos bombas nucleares de 23 kilotones cada una.
El objetivo principal de estas pruebas fue determinar el efecto que una explosión atómica tendría sobre una flota de barcos. De las noventa y cinco embarcaciones utilizadas durante los ensayos, setenta y cinco fueron puestas en cuarentena debido a los altos niveles de contaminación por radiación que recibieron después de la segunda detonación.