Excavaciones en la ancestral ciudad romana de Viminacium, en Serbia, han desenterrado un sarcófago intacto con dos esqueletos adornados con oro y plata. Ilija Mikic, antropólogo presente en el lugar, ha dicho que los esqueletos pertenecen a un hombre alto de mediana edad y a una delgada mujer más joven. Además de tres delicadas botellas de perfume, la mujer poseía aros de oro en forma de flores, un collar, un espejo de plata y varios ganchos elaborados para el cabello. El hombre, por su parte, solo conservaba un cinturón con hebilla de plata y restos de unos zapatos.
«De acuerdo al ajuar funerario, podemos deducir que se trataba de una pareja perteneciente a la clase social más alta», explicó Mikic.
El lugar de Viminacium, cercano al pueblo de Kostolac, 70 km al este de la actual Belgrado, supo ser un campamento militar y la capital de la provincia romana Moesia Superior, hacia el siglo I d.C. Entre sus edificaciones más importantes había un hipódromo, barracas fortificadas, un foro, un palacio, templos, un anfiteatro, acueductos, baños y talleres. Los historiadores piensan que la ancestral ciudad pudo albergar hasta 40.000 personas.
«Sin embargo, hasta ahora solo el 4 por ciento de Viminacium ha sido explorado», dijo Miomir Korac, director de las actuales excavaciones arqueológicas.
«Solo Viminacium, con sus 450 hectáreas, es toda un área abierta para la exploración. Y estoy seguro que esto nos revelará una inconmensurable cantidad de información», sentenció Korac.
Devastada por los hunos en el siglo V, Viminacium fue reconstruida por el emperador Justiniano. Posteriormente fue nuevamente destruida por los eslavos en el siglo VI. Desde entonces, el sarcófago recientemente descubierto ha sobrevivido a saqueadores, arados, y a la maquinaria pesada de las minas de carbón cercanas.