Nada es casualidad, y en nuestra aventura radiofónica tampoco
Cada vez tengo más claro que nada ocurre por casualidad, que nada en nuestro camino llega simplemente porque sí, que la fortuna puede aparecer de mil maneras, sensaciones percibidas bajo un millón de formas que transforman un instante en una inolvidable experiencia, experiencias que, de algún modo, construyen al afortunado. Puede…