Un investigador de Stanford intenta usar reconocimiento facial para conocer la orientación política de cualquier individuo

Antes de ampliar el estudio de Kosinski, se pondrá en contexto el uso de reconocimiento facial para distinguir rasgos de personalidad u tras características subjetivas. El portal VentureBeat apunta al concepto pseudocientífico de la fisonomía, o la idea de que el carácter o la personalidad de una persona pueden evaluarse a partir de su apariencia. En 1911, el antropólogo italiano Cesare Lombroso publicó una taxonomía en la que declaraba que “casi todos los delincuentes” tienen “orejas de jarra, pelo grueso, barbas finas, senos pronunciados, barbillas prominentes y pómulos anchos”. Los ladrones se destacaban por sus “ojos pequeños y errantes”, dijo, y los violadores por sus “labios y párpados hinchados”, mientras que los asesinos tenían una nariz “a menudo parecida a un halcón y siempre grande”.

La frenología, un campo relacionado, implica la medición de protuberancias en el cráneo para predecir rasgos mentales. Los autores que representan al Instituto de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos (IEEE) han dicho que este tipo de reconocimiento facial está “necesariamente condenado al fracaso” y que las afirmaciones sólidas son el resultado de un diseño experimental deficiente.

El profesor de Princeton Alexander Todorov, crítico del trabajo de Kosinski, también sostiene que métodos como los empleados en el documento de su colega son técnicamente defectuosos. El profesor alega que los patrones recogidos por un algoritmo que compara millones de fotos pueden tener poco que ver con las características faciales. Por ejemplo, las fotos publicadas por uno mismo en sitios web de citas proyectan una serie de pistas no faciales. Además, la investigación actual de la psicología muestra que en la edad adulta, la personalidad está principalmente influenciada por el entorno.

Si bien es potencialmente posible predecir la personalidad a partir de una foto, esto es, en el mejor de los casos, un poco mejor que la casualidad en el caso de los humanos“, Daniel Preotiuc-Pietro, investigador postdoctoral de la Universidad de Pensilvania que trabajó en la predicción de la personalidad a partir de imágenes de perfil, dijo a Business Insider en una entrevista de 2016.

Volviendo a Kosinski, en esta ocasión sacó una muestra de un poco más de un millón de caras, en gran parte de un “sitio web de citas” que no se menciona pero que es utilizado en Estados Unidos, Reino Unido y Canadá. Otras caras fueron sacadas de perfiles de Facebook recogidos por MyPersonality, un test de personalidad con el que Facebook rompió lazos en 2018 por sus prácticas de recopilación de datos.

En todos los casos, ya sea ese sitio de citas o en su perfil de Facebook, esos usuarios indicaron que eran “conservadores” o “liberales”.

Estos lotes de rostros se introdujeron en un algoritmo de reconocimiento facial de código abierto que luego redujo cada rostro a aproximadamente 2000 puntos de datos diferentes “subsumiendo sus características principales”. Después de alimentar el algoritmo con suficientes puntos de datos extraídos de las fotos, Kosinski creó un conjunto de puntos “promedio” que podría estar vinculado a una cara de inclinación liberal o conservadora, y un algoritmo que podría predecir con éxito la afiliación política de una persona a partir de su fotografía el 72% del tiempo, de media.

Lo que distingue a una cara de izquierdas de una cara de derechas es difícil de definir, al menos según el estudio. Kosinski intentó aislar algunos rasgos faciales, como las gafas que usaban en una foto determinada o la forma en que su rostro estaba inclinado hacia la cámara, y probó si estos rasgos también podían actuar como predictores de las inclinaciones políticas de esa persona. Ninguna de estas características fue tan acertada como la caja negra que es el algoritmo.

Dicho esto, hubo algunos puntos en común que Kosinski describe en sus notas. Las personas que se identifican a sí mismas como liberales, por ejemplo, eran más propensas a mirar directamente a la cámara y eran más propensas a expresar “sorpresa” en sus fotografías. Los conservadores, por otro lado, además de ser en general más blancos, masculinos y viejos , también expresan más “disgusto” en sus fotos que sus contrapartes liberales. Pero no hay nada en las notas del autor que cubra por qué se realizó este estudio en primer lugar, como señala VentureBeat

Las notas de Kosinski intentan refutar estos hallazgos diciendo que “muchos estudios han demostrado que las personas pueden determinar las opiniones políticas, la personalidad, la orientación sexual, la honestidad y muchos otros rasgos de los demás a partir de sus rostros”, sin realmente apuntar a ningún estudio para respaldar su punto. Tal vez sea porque toda la evidencia científica parece apuntar en la dirección opuesta.

https://docs.google.com/document/d/1jh4qINWnBsAb6-cntyvzvO7e7sPY-AKc9kLEZICWuW0/edit#

https://www.nature.com/articles/s41598-020-79310-1

https://osf.io/y5wr9

https://www.robots.ox.ac.uk/~vgg/software/vgg_face/

https://www.businessinsider.com/does-faception-work-2016-10

Acerca de Félix Ruiz

Trabajador Social de formación y apasionado de las temáticas relacionadas con el misterio desde siempre. Redactor de noticias, escritor novel, lector compulsivo y buscador incansable de preguntas que compartir con todo aquel que sea curioso y quiera saber más.

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