Tablillas descubiertas en Irak revelan ubicación de la ciudad regia perdida de Mardama

En un emocionante descubrimiento, los arqueólogos han encontrado la ubicación de la ciudad regia perdida de Mardama.  La antigua ciudad hurrita permaneció enterrada durante milenios hasta que los arqueólogos desenterraron los restos de una ciudad en la árida llanura del este del Tigris, en Irak. Las ruinas permanecieron sin ser identificadas durante cinco años, pero el reciente descubrimiento de un conjunto de antiguas tablillas cuneiformes permitió a los expertos identificar el lugar como la antaño poderosa ciudad de Mardama.

Sci-News informa de que los arqueólogos y filólogos de la universidades de Tubinga y Heidelberg en Alemania hicieron el singular descubrimiento cerca de la ciudad de Bassetki, en la región autónoma de Kurdistán situada en el norte de Irak. El equipo, dirigido por el profesor Peter Pfälzner y trabajando conjuntamente con especialistas del Departamento de Antigüedades de Duhok, estableció la ubicación de la antigua ciudad regia basándose en tablillas cuneiformes recientemente descubiertas datadas entre los años 1300 a. C. y 1200 a. C.

Se cree que Mardama fue fundada entre los años 2800 a. C. y 2650 a. C., alcanzando su máximo apogeo entre el 1900 a. C. y el 1700 a. C. Se encontraba situada sobre una importante ruta comercial, lo que hizo de ella una próspera ciudad de gran importancia estratégica.  Mardama era una potencia regional y un centro regio, a menudo en guerra con los poderosos reinos de Mesopotamia ubicados más al sur.

Mardama, como era conocida en las antiguas fuentes babilónicas, alternó periodos de independencia con otros de dominio extranjero. La ciudad fue conquistada por el Imperio acadio, pero después recuperó su independencia bajo el cetro de un monarca hurrita. Posteriormente fue destruida por invasores de los montes Zagros. El centro urbano fue absorbido más tarde por Mesopotamia y, a continuación por el Imperio asirio. Parece que la ciudad fue destruida y reconstruida muchas veces en el transcurso de su larga y turbulenta historia.

Los arqueólogos alemanes de la Universidad de Tubinga descubrieron el lugar en el año 2013, pero no estaban seguros de cuál era el antiguo nombre de su descubrimiento. Excavaron el Tel Bassetki, una gran colina situada en la árida llanura del este del Tigris, dominado por la cordillera de los montes Zagros.  El equipo de excavación se dio cuenta enseguida de que se trataba de un importante yacimiento arqueológico. Para su sorpresa, parecía no haber sido afectado por los saqueadores ni haber sufrido daños por los numerosos conflictos que se han producido en el norte de Irak en los últimos años.  Sin embargo, el descubrimiento más espectacular fue realizado apenas en verano del 2017, cuando más de 90 tablillas cuneiformes salieron a la luz después de más de tres milenios.

Un total de 92 tablillas cuneiformes fueron descubiertas ocultas en una vasija cerámica entre las ruinas de un palacio. Las tablillas cerámicas fueron fotografiadas, enviándose las imágenes a Betina Faist, reconocida filóloga de la universidad alemana de Heidelberg. Faist es experta en antiguo asirio, idioma en el que están escritas las tablillas, y utilizó las fotografías para descifrar su compleja escritura cuneiforme. Cuando se encontraba traduciendo el texto, la investigadora encontró una referencia a Mardaman, la palabra asiria utilizada para referirse a Mardama. El profesor Pfälzner afirmaba sobre el descubrimiento que “para nuestra sorpresa, la Dra. Faist fue capaz de identificar el lugar como la antigua ciudad de Mardama”.

Las tablillas se referían a la ciudad como parte del poderoso Imperio asirio y sede del gobernador asirio de la región, y de hecho parecen pertenecer a un gobernador llamado Assur-nasir. El profesor Pfälzner y su equipo estaban asombrados: ‘de repente se puso de manifiesto que nuestras excavaciones habían descubierto el palacio de un gobernador asirio’. Estas tablillas cuneiformes nos ofrecen un conocimiento sin precedentes sobre la vida y los tiempos de las gentes de Mardama. Proporcionan además valiosa información sobre la administración, la economía y el comercio de aquella antigua ciudad.

Las tablillas fueron depositadas en un gran recipiente cerámico que fue sellado con arcilla y se encontraba en el Palacio del gobernador. El profesor Pfälzner ha especulado que se ocultaron las tablillas después de que gran parte de la ciudad hubiera sido arrasada por el fuego, en un intento deliberado por salvarlas.  Algunos de los habitantes de la ciudad, probablemente miembros de la administración asiria, querían conservar aquellos textos, claramente valiosos.

http://www.sci-news.com/archaeology/assyrian-clay-tablets-location-mardama-05996.html

Acerca de Félix Ruiz

Trabajador Social de formación y apasionado de las temáticas relacionadas con el misterio desde siempre. Redactor de noticias, escritor novel, lector compulsivo y buscador incansable de preguntas que compartir con todo aquel que sea curioso y quiera saber más.

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