Astrofísicos de la Universidad de Harvard y del Centro Harvard-Smithsonian acaban de determinar que la probabilidad de que haya vida en el nuevo sistema de exoplanetas TRAPPIST-1 es más elevada que en la Tierra, de lo que han informado en un estudio publicado este 2 de marzo.
El pasado mes de febrero los científicos de la NASA descubrieron un nuevo sistema planetario más allá del Solar. Alrededor de la estrella enana fría TRAPPIST-1, ubicada en la constelación de Acuario —a 39 años luz de nuestro planeta—, orbitan siete planetas del tamaño de la Tierra que pueden contener agua. En al menos tres de ellos podría haber océanos. La distancia entre los planetas del sistema TRAPPIST-1 es significativamente menor que la que hay entre la Tierra y Marte. Según los científicos, ello facilita la transferencia de moléculas orgánicas desde un cuerpo celeste a otro, fenómeno conocido por la ciencia como panspermia.
Con la ayuda de modelos matemáticos los astrofísicos ha avalado la alta probabilidad de probar la hipótesis de la panspermia en el TRAPPIST-1, lo que aumenta las posibilidades del surgimiento de la vida, o de que se se produzca la abiogénesis, que es la aparición de organismos vivos a partir de materia inerte. Dada la distancia entre los planetas, las posibilidades de que se dé este último proceso en el sistema TRAPPIST-1 son más altas que en nuestro Sistema Solar, concluyen.