El programa de radiofónico “Misterio en Red” se prepara para sacar a la luz, en el último programa de su tercera temporada, el resultado de un intenso reportaje llevado a cabo durante varios días en un entorno de alto valor cultural emplazado en la provincia malagueña.
El lugar se sitúa en el municipio malagueño del Rincón de la Victoria, allí, en la Cala del Cantal, se sitúan una serie de cavidades repletas de peculiaridades con alto valor geológico, histórico y antropológico. Además, es el escenario de múltiples leyendas, siendo alguna de ellas producidas por los encuentros con extrañas presencias en su interior. Se trata de la cueva del Higuerón, más conocida por la leyenda que la nombra como “La cueva del Tesoro”. Una cueva moldeada particularmente por el mar, pues su morfología es de origen marino, y por ello, se convierte en un lugar único en Europa.
En su interior existe la huella del pasado, pues entre los fósiles marinos de sus pasadizos se encuentra la marca de sus antiguos moradores. Allí aún permanece, como el eterno vigía de otro tiempo, los trazados que remarcan la silueta de un ciervo datado de entre el 30.000 y el 40.000 a.C. En el mismo complejo, y con la misma antigüedad, yacen las arcaicas representaciones de los miembros del grupo bajo la silueta de “aquel” que sostiene una suerte de cetro. Los restos encontrados, providentes del paleolítico y del neolítico, han mostrado la riqueza viva de un entorno que sigue siendo mágico.
En su interior existe una galería que esconde uno de sus secretos. Allí erige una figura tallada por el propio mar, y donde algunos estudiosos señalan que se trata de la representación de la diosa fenicia “Noctiluca”. Sin embargo, otros expertos ponen en duda esta idea, aunque coinciden en que allí podría celebrarse, en su lejano pasado, algún tipo de ritual, pues a los pies de la figura, junto al altar que la preside, se encontraron restos de animales como huesos y cenizas como muestra de los antiguos sacrificios.
Sobre la cueva recaen varias historias, como la que cuenta que allí se ocultó, durante 8 largos meses, Marco Licinio Craso junto a dos amigos y diez criados, huyendo de Mario y Cinna, en el año 86 a.C. Aunque su principal leyenda proviene de la llamada ” el tesoro de los cinco reyes”, cuya historia le da nombre. Dicen que fue Tasufín ibn Alí quien hostigado por los almohades lo embarcó en la costa de Orán, y que un emisario lo escondió aquí en el siglo XII. Desde entonces, con la intención de encontrarlo, los buscadores de tesoros llegaron al lugar.
El más famoso de aquellos buscadores fue Antonio de la Nari, más conocido como “El suizo”. Se pasó varios años dinamitando la roca viva de la cueva, buscando infatigablemente el tesoro escondido. Solo salía de la cueva para aprovisionarse de alimentos y agua para luego regresar a las profundidades en busca de su ansiado tesoro. Falleció en una de sus explosiones, y su cuerpo jamás fue rescatado, dando lugar otro tipo de historias que aún perduran y donde se asegura que el obsesivo Antonio de la Nari sigue buscando el tesoro de los cinco reyes.
En 1951, Manuel Laza compró los terrenos que daban acceso a la cueva y comenzó a excavar, y durante 38 años logró investigar y escribir sobre todos sus hallazgos, atrapado por los hechos reales que sin duda resultaban mágicos.
Esteban Palomo y su equipo han querido mostrar, en un profundo y extenso reportaje, todo el valor que yace en este atávico entorno. Para ello han acudido a las principales fuentes académicas y científicas que han estudiado las cuevas del Cantal, han escudriñado los datos históricos existentes en cada centímetro de tierra y roca repartido entre las tres cavidades, han recorrido todas sus galerías y pasadizos en busca de sus historias, y han registrado la voz de los que aseguran haber experimentado lo imposible en el interior de la cueva del Higuerón.
“Misterio en Red” finalizará su tercera temporada en antena el próximo sábado 17 de Junio. El programa pretende impulsar con este reportaje uno de los mayores tesoros culturales malagueños, mostrar todo su valor histórico, geológico y antropológico, y dar a conocer los misterios que residen en la conocida “Cueva del Tesoro”.