Para aquellos que no están familiarizados con la historia, solo podemos decir que la película cuenta una historia tan intensa y dramática como cabría esperar y que cuenta con la ayuda de algunos de los efectos fotográficos más interesantes que jamás se hubieran intentado hace más de cien años. La formación del monstruo horrible a partir de los químicos abrasadores de una enorme caldera en el laboratorio del Doctor es probablemente la escena más extraña, desconcertante y fascinante que se haya visto en una película del primer cine.
La noticia sale del propio blog de la Biblioteca del Congreso, donde Mike Mashon, jefe de la Sección de Imágenes en Movimiento, Transmisión y Sonido Grabado de la Biblioteca del Congreso, comenta a los lectores el proceso de adquisición y restauración de una de las únicas impresiones de la película muda de 1910, la primera adaptación cinematográfica conocida de la historia y una de las películas perdidas más conocidas de todos los tiempos.
Según explica el sitio, la copia de nitrato de plata pertenecía al coleccionista Alois F. Dettlaff desde los años 50. Este hombre la proyectó en múltiples festivales y convenciones de monstruos durante décadas.
En 1986, el entonces presidente de la Academia de Hollywood, Robert Wise, intentó convencerlo de que esa institución preservara esa última copia de nitrato de plata. Dettlaff se negó y mantuvo en su poder la película hasta 2005, cuando murió. Mientras, hizo copias en DVD para vender en las proyecciones. Algunas de esas copias fueron pirateadas y hoy se pueden ver en YouTube.
Tras la adquisición de la película en 2014, la Biblioteca lo ha restaurado en formato digital y está disponible para poder ser disfrutada gratuitamente en su web o en el vídeo que os hemos dejado arriba.
https://blogs.loc.gov/loc/2018/11/the-first-film-version-of-frankenstein-newly-restored/
https://www.youtube.com/watch?v=WhoFCG0_SyQ