Últimamente somos testigos de noticias sorprendentes día a día. Hay muy pocos que se libren de presentar al mundo una nueva prueba de lo raro que se está volviendo todo. Es muy posible que la capacidad de sorprenderse de algunos sea prácticamente nula, pero desde luego, esta noticia debería hacerlo.
El desarrollo de la inteligencia artificial está dando pasos agigantados en los últimos tiempos. Tantos que están empezando a ser un verdadero quebradero de cabeza para algunas figuras ilustres, como el desaparecido Stephen Hawking o el excéntrico multimillonario Elon Musk. La cuestión que plantean no es baladí, pues señalan que cada vez es más necesario que haya un control real y activo de las posibilidades de aprendizaje que puedan tener estas inteligencias. ¿Por qué? Básicamente, porque hay quienes temen que no puedan ser controladas y pasen a la acción, eliminando de paso a su competencia. O sea, los humanos. Un miedo que para algunos es irracional y totalmente injustificado,mientras que para otros es muy real. Nada de episodios de Black Mirror, sino sucesos que son plenamente posibles.
Desde luego, los progresos de los programadores son cada vez más sorprendentes. Ya hay máquinas inteligentes capaces de ganar al campeón mundial de Goo de crear cuadros que no tienen nada que envidiar a los de grandes artistas humanos como Van Gogh o Munch. Algoritmos muy fiables son capaces de predecir qué votará determinada persona en las próximas elecciones o qué webs visitará en el futuro, todo gracias a los historiales de búsqueda. No hay límites definidos para el potencial de estas inteligencias artificiales. Y tampoco hay regulaciones claras al respecto.
Con un panorama así, solo era cuestión de tiempo que saltaran noticias tan curiosas como la que se acaba de dar a conocer, y que tiene como eje uno de esos MMORPG – videojuegos de rol multijugador masivos en línea – que tanto tiempo ocupan a millones de jugadores de todo el mundo. La del videojuego ya es la industria que más dinero genera a nivel mundial – solo con la competencia real de la telefonía, el cine o la pornografía –, por lo que no es de extrañar que las compañías desarrolladoras se esfuercen cada vez más por brindar experiencias fuertes a sus usuarios. Lo que nadie esperaba es que un juego tomara el control y decidiera llevar a cabo un evento masivo sin que nadie lo viera venir.
Los PNJ luchan por el territorio
Si uno se pasea por alguno de estos universos digitales en forma de videojuegos, se dará cuenta de que los personajes que no controlamos llevan a cabo unas determinadas acciones. Algunas van desde un simple paseo o tomar un refresco en algún bar, mientras otras son más complejas, como atajar un disparo a portería o tener una conversación con otro personaje mientras conduce. Todo, por supuesto, bajo el estricto control de los programadores, que intentan dar cierta “libertad de decisión y acción” a estos avatares para así favorecer la experiencia de juego. Hay ejemplos muy logrados, como el reciente Red Dead Redemption 2, de Rockstar Games,en las que algunos PNJ desarrollan toda una rutina diaria que puede ser observada por el jugador si está atento a sus movimientos. Pero en este caso todo se ha descontrolado, al menos aparentemente.
Está claro que los videojuegos han entrado con fuerza dentro del bagaje cultural de generaciones de jugadores desde los años setenta, siendo en estos momentos cuando ha alcanzado una importancia tal que está desplazando incluso a la lectura. Algunos de ellos ya son considerados verdaderos mitos, con nostálgicos que tienen grandes recuerdos jugando a sus aventuras favoritas. Incluso hay algunos de ellos que han arrastrado a algunos fanáticos a la muerte, como los ejemplos que da Simon Parkin en Muerte por videojuego, un ensayo en el que el autor ya alertaba de algunos de los efectos perjudiciales que conlleva la adicción a esta forma de entretenimiento. Pero ni siquiera él fue capaz de atisbar lo que podrían ser los juegos del futuro.
Dentro de los MMORPG, quizá EVE Online no es de los más conocidos, pero cuenta con muchos seguidores de diversas nacionalidades. La premisa del juego es clara: un futuro en el que la Tierra ya no es capaz de sustentar a tantas personas ha obligado a los humanos a colonizar la Vía Láctea. Ante tal expansión, no quedó ningún planeta habitable que no fuera parasitado, a pesar de tener que guerrear con otras razas extraterrestres para ello. Un misterioso agujero de gusano permitió a los colonizadores hallar una galaxia inexplorada que conquistar, pero solo unas pocas colonias sobrevivieron al colapso de ese agujero. Encerradas en un lugar nuevo y hostil y obligados a sobrevivir a una Edad Oscura Tecnológica, los cinco imperios supervivientes – Caldari, Gallente, Amarr, Minmatar y Jove– continúan en pie de guerra.
El juego está activo desde 2003 de forma ininterrumpida, y sigue actualizándose de manera periódica con nuevos contenidos. Precisamente, una de estas actualizaciones ha sido la que ja creado toda la polémica en torno al juego, a pesar de que se lanzó en noviembre de 2017, sin tener efectos tan evidentes hasta ahora. Ha sido 3Dnews la que ha lanzado la voz de alarma, al señalar que los PNJ han luchado entre sí por el territorio, enfrentando a facciones rivales mediante un sistema de alianzas y traiciones “muy humanas”.
Dentro de los roles que pueden tomar los jugadores y los PNJ, hay algunas como piratas, mineros o vagabundos. Pues bien, la última actualización del juego permitió que estos avatares ampliaran sus opciones de juego, con una IA mejorada, que ha hecho que, literalmente, unos borren del mapa a otros. De esta forma, los piratas quisieron arrebatar sus territorios y recursos a los mineros, apareciendo en el lugar una tercera fuerza a tener en cuenta, los vagabundos. Ante una lucha que a priori iba a ser equilibrada, la IA del juego pareció tomar una decisión muy inteligente: unirse a otra facción para hacer frente a un enemigo común. El imperio Amarr prestó una flotilla a los atacantes y todos se enzarzaron en una batalla que dejó a muchos caídos tras de sí. En concreto, la flotilla acabó con los vagabundos. En cuanto los piratas “intuyeron” su victoria, se volvieron en contra de la flotilla y acabaron con la batalla y con el resto de PNJ que participaron en ella.
3Dnews lo ha dejado claro: «Se desconoce si fue un accidente, o si la inteligencia artificial respondió a sus acciones». ¿A qué se refieren exactamente? ¿A la iniciativa de los piratas,a su alianza con la flotilla de Amarr o a su posterior traición? Una concatenación de eventos que parece alejada de la simple programación de un juego. A pesar de que algunos puedan alegar que es posible que algunos PNJ se enfrenten entre sí, cosa que es cierta, dudo que alguien haya asistido a un evento de este calibre. De hecho, nadie fue capaz de observarlo.
La compañía islandesa CPP Games, encargada de la distribución y el mantenimiento del juego, ha sido clara al respecto. Nadie dentro dela empresa fue consciente de lo ocurrido hasta que todo acabó. Por supuesto, tampoco ha habido ningún usuario que fuera testigo de tal batalla. Todo fue producto de un efecto extraño generado por la última actualización del juego. La catalogación de “error” solo se debe al desconocimiento de la causa última. Hasta ahora,solo pueden decir que están investigando al respecto, mientras algunos medios sensacionalistas relacionan este caso con ese miedo ala inteligencia racional que está tan de moda en el presente.
¿Cuál es el futuro del videojuego? Solo el tiempo lo dirá. Quizá sea el Streaming, puede que la realidad aumentada. Pero, desde luego, esperemos que no esté en manos de una inteligencia artificial capaz de detonar batallas con una secuencia razonada, con pretextos y consecuencias,como la que ha tenido lugar en EVE Online. Porque si es capaz de hacerlo a esta escala, ¿qué no sería capaz de hacer con su capacidad de aprendizaje si tiene acceso a mucha más información?
