Hace un mes, el organismo de regulación alemán presentó una cláusula que permite vender videojuegos con símbolos Nazis siempre y cuando tengan un propósito artístico, científico o que se representen eventos particulares de la historia.
Una de las consecuencias derivadas del reconocimiento del error de los gobiernos alemanes por lo ocurrido durante la II Guerra Mundial fue la prohibición del uso de la simbología nazi, sujeto a fuertes sanciones económicas y a penas de cárcel en casos graves. Con el paso de las décadas y la irrupción de los videojuegos, este veto alcanzó a los videojuegos, pues usar simbología de este tipo es contraria a la Carta Magna del país.
Pero algo ha cambiado en las últimas fechas, y es que el pasado mes las autoridades han permitido que se usen símbolos nazis en videojuegos siempre y cuando respondan a un propósito artístico, científico o eventos particulares de la Historia. Es el caso de Attentat 1942, una especie de documental interactivo, con el que podemos “dialogar” y decidir hacia dónde seguir. Un juego indie – aunque es difícil catalogarlo como videojuego, todo sea dicho – de corta duración que acaba de traspasar el veto impuesto hasta ahora por una Alemania que aprendió a base de dolor lo que supone aceptar el peso de los acontecimientos históricos. Como se ha dicho, en el juego no se corre ni se lucha, tampoco se muere. Se alterna entre vídeos de un supuesto abuelo del protagonista que combina escenas estáticas dibujadas con imágenes reales, en una trama ficticia pero basada en la cruda realidad de la II Guerra Mundial.
A pesar de ser lanzado en octubre de 2017, no ha sido hasta ahora cuando ha sido posible hacerse con él dentro de territorio alemán, pudiendo los jugadores y usuarios de PC disfrutar de sus curiosas mecánicas.
https://www.fayerwayer.com/2018/09/attentat-1942-nazi-alemania/
